La actriz Carmen Maura regresa al teatro protagonizando un montaje que se inspira en una masacre ocurrida en el bar Pulse en la ciudad de Orlando en los Estados Unidos.
La actriz le explicó a la prensa que con este regreso la ha pasado genial ya que tenía 45 años sin hacer giras y llevaba ya 4 años sin subirse a un escenario, estas declaraciones fueron hechas tras el estreno de la obra en el Real Auditorio Carlos III de El Escorial el pasado septiembre, la actriz dijo haberse sentido apremiada por la energía que tiene el texto. La ganadora de los premios Goya en cuatro oportunidades también explicó que es la primera vez que ella se siente obligada a hacer una función.
También se sintió de alguna manera responsable por tener muchos amigos homosexuales y dice conocer bien los problemas familiares que sufren muchos de ellos. Sintiendo igualmente que podía interpretar este papel, que representa a una mujer normal comunicando sus sentimientos, no a una mujer antigua o un papel como el de la señorita Rottenmeier.
Carmen Maura estará encarnando al personaje hasta el día 5 de mayo en el Teatro Infanta.
Los personajes
Mientras la obra se desarrolla se van desvelando los detalles del pasado de la mujer, en esta obra no solo se recuerda el atentado terrorista del bar Pulse en Orlando, también el de la Bataclan en la ciudad de Paris, el del paseo marítimo en Niza y el de Ramblas en Barcelona.
El escritor Clua explicó que ambos personajes intentarán comprender el sinsentido y las consecuencias que tiene el odio y cuáles son las estrategias que utilizamos para evitar que esta nos destruya el alma.
Y es que ambos personajes se ven enfrentados al mismo hecho, pero desde dos posiciones totalmente contrapuestas, en las que podría pensarse que no existe ningún punto de coincidencia para lograr avanzar juntos, el dramaturgo también piensa que ante hechos tan horribles resulta demasiado difícil asumir una posición sensata y mucho más llegar a conclusiones de forma serena, sobre todo en tiempos tan polarizados, donde se asumen posiciones tan radicales y tan extremas, hay un aumento en la retórica del discurso machista, racista y de los LGTBfobicos.
Las artes escénicas y el arte en general son un arma poderosa que sirve para evidenciar las realidades, tanto el odio como los deseos de destruir a otros son sentimientos que no desparecen, por el contrario actualmente se encuentran en pleno resurgimiento, y hay quienes consideran que incluso tienen una identidad propia, por lo que el teatro sirve como un muro para contener todo ese odio.
La señora Amelia
El director de la obra Josep María Mestres, opina que este es un texto importante que tiene la capacidad de ejercer un efecto sanador sobre el público, mostrando asi dos formas diferentes de ver el mundo y también dos maneras de vivir unidos por el amor y el dolor, ambos personajes son seres dolientes que tienen la necesidad de confrontar y de entender, la obra tiene la cualidad de una narrativa de carácter universal, lo que la hace una producción internacional.
La internacionalización
Luego fue montada en Grecia en la ciudad de Atenas, en Italia en la ciudad de Catania, en Uruguay en Montevideo y en Rumania en Târgu Mures.
Aunque es un texto muy intenso, los artistas se comprometen con los espectadores que asistan a disfrutar de esta obra que saldrán de la sala de muy buen ánimo, ya que garantizan que se divertirán como los que ya la han visto que han quedado encantados.
Esta reconocida actriz que ya cuenta con 73 años no tiene planeado retirarse, por el contrario afirma que ya tiene varias propuestas tanto en el cine como en el teatro.