La preocupación más importante que surge cuando estamos ante la necesidad de contratar los servicios de ayuda para una persona mayor que es dependiente, es precisamente el tema económico. De hecho es esta una de las variables más importantes a considerar para la toma de una decisión final, esto a propósito de que el área de cuidado de 
personas mayores dependientes, tiene costes bastantes elevados: en el caso de las residencias porque poseen precios totalmente inaccesibles, por su parte los centros de día presentan tarifas del todo prohibitivas y los servicios que prestan los cuidadores a domicilio demasiado costoso por lo que conocer las ayudas públicas es necesario.
Es por ello que debemos tener un marco que garantice el acceso a los recursos y los servicios para atender la dependencia, esa es la Ley de Promocion de la Autonomía Personal y Atención a las personas en situación de Dependencia, especialmente dadas las circunstancias de carestía que presentan los servicios y el declive del poder adquisitivo de las personas mayores.
¿Qué es la dependencia?
Es el estado permanente de algunas personas puede ser debido a la edad, una enfermedad o a una discapacidad, por estar ligada a la pérdida o a la falta de autonomía física, intelectual, mental o sensorial, se hace necesaria la atención o ayuda de otra u otras personas para llevar a cabo las actividades más básicas de la vida.
Según lo establece la Ley 39/2006 existen 3 grados de dependencia, que vienen dadas por los alcances de las limitaciones de las personas afectadas:
¿Cuáles son los tipos de Dependencia?
Dependencia Grado 1 o dependencia moderada
Es cuando una persona necesita ayuda para realizar varias actividades básicas para el desarrollo de la vida diaria una vez en un día, como por ejemplo las actividades domésticas, la movilidad, el cuidado personal.
Dependencia Grado 2 o dependencia severa
Es cuando una persona necesita ayuda para realizar varias actividades que son básicas para el desarrollo de la vida diaria dos o tres veces en un día y adicionalmente requiere apoyo para lograr mantener la autonomía.
Dependencia Grado 3 o gran dependencia
En este caso una persona necesita ayuda de forma continua para llevar a cabo las actividades más básicas de su vida diaria, y de forma adicional requiere de apoyo general.
¿Quiénes se benefician de la Ley de Dependencia?
Para obtener el beneficio de la prestación y ayuda de la Ley de Dependencia es necesario cumplir con algunos requisitos:
Tener nacionalidad española
Encontrarse en cualquier de los grados de situación de dependencia establecidos por la ley
¿Cuáles son los beneficios a los que da acceso la Ley de Dependencia?
Esta ley permite al dependiente su participación y actuar en programas promocionales para una vida saludable.
Tener acceso a las plataformas de información y comunicación, para recibir respuesta y apoyo ante una emergencia.
Recibir servicios de atención doméstica o personalizada como la cocina y el aseo, que facilitan la atención del dependiente en su hogar
Atención integral a los dependientes, bien sea diurno o nocturno, para potenciar los niveles de autonomía ayudando a familiares y a los cuidadores.
Servicios sanitarios y personales a los dependientes
¿Cuáles son las ayudas económicas para la persona mayor dependiente?
En caso de que una persona mayor no reciba los servicio que se prestan en el marco de la Ley de Dependencia, puede recibir una prestación de tipo económica, que solo debe ser destinada a cubrir gastos de contratación de servicio.
Las prestaciones económicas son:
Prestación de tipo económica destinada a los cuidados en su entorno, que incluye apoyo a los cuidadores no profesionales
Si una persona dependiente es atendida por un familiar y este reúne las condiciones, podría percibir ayuda económica.
Prestación de tipo económica para facilitar la contratación de asistencia personal, durante las horas necesarias para obtener mayor autonomía en las actividades básica de la vida.
Horas de asistencia establecidas en la Ley de Dependencia
La Ley de Promocion de la Autonomía Personal y Atención a las personas en situación de Dependencia, al igual que otras leyes, establece pautas y máximos que pueden ser catalogados por algunos como optimistas, ya que los servicios o las prestaciones que esta ofrece son inaccesibles y en muchos casos insuficientes, además de que no cumplen con el principal objetivo de facilitar ayuda a las personas que se encuentran en situación de dependencia, y esto para nadie es un secreto.
Según sea el grado de dependencia la Ley prevé la cantidad de horas de servicios:
Gran dependencia o Grado 3 De 55 a 90 horas/mes
Dependencia severa o Grado 2 De 30 a 55 horas/mes
Dependencia moderada o Grado 1 De 12 a 30 horas/mes
Fallas de la Ley de Promocion de la Autonomía Personal y Atención a las personas en situación de Dependencia
Horas de atención en el domicilio son insuficientes
Las ayudas carecen de alcance y de efectividad, 90 horas al mes, 3 horas diarias son escasas en caso de dependencia extrema
En el sector público no se tiene acceso a servicios de cuidadoras
Largos trámites administrativos para acceder a los servicios o a las prestaciones con obstáculos y trabas
Es por eso que se hace necesario tener y hacer uso de todas las herramientas que se encuentren disponibles para facilitar el acceso a la información de las subvenciones y todos los beneficios públicos existentes.
Que permitan tambien obtener los precios más adecuados para la obtención del mejor servicio asistencial para las personas mayores que sean dependientes.
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